La Inteligencia Artificial

El pasado día 17 de octubre tuvo lugar la jornada sobre el impacto de la inteligencia artificial (en adelante IA) en el ejercicio de la abogacía en el Ilustre Colegio de Abogados de Mataró, en la cual se expusieron los riesgos y las oportunidades que puede comportar su implementación y la necesidad de adaptarse a las nuevas tecnologías en la profesión tras la reciente aprobación del nuevo Reglamento Europeo de inteligencia artificial.

A medida que la IA se integra más en la práctica legal, surgen cuestiones sobre la ética y la responsabilidad. Es fundamental que los abogados mantengan un enfoque crítico y ético en el uso de estas tecnologías. La implementación de las nuevas herramientas que incorpora la IA puede ser de una gran utilidad y una mayor productividad, debido a la existencia de ciertas tareas que pueden optimizarse, sin embargo, la necesidad de la formación continuada en el ejercicio de la abogacía es esencial para abordar estos novedosos aspectos.

El uso de la IA en el ámbito legal puede ofrecer muchas ventajas en el ejercicio de la abogacía, no obstante, también conlleva ciertos riesgos que deben tenerse en consideración. El principal riesgo que comporta, y con el que muchos profesionales se están encontrando, es la dificultad probatoria y de investigación, dada la facilidad con la que puede falsearse cualquier tipo de prueba. Otras preocupaciones versan sobre la ciberseguridad, la protección de datos y la regulación sobre la nueva tecnología.

Durante la jornada se llevó a cabo una masterclass sobre la utilización del “ChatGPT” aportando varios consejos útiles para garantizar la ciberseguridad en el ejercicio diario de la abogacía, recalcando en todo momento que no trata de una herramienta que deba sustituir alguna función como abogado, sino complementarla. A pesar de que la IA puede realizar funciones o tareas específicas con eficiencia, no puede llevar a cabo funciones críticas.

Asimismo, se llevó a cabo un debate sobre los retos legales y deontológicos tras la entrada de la IA en el ejercicio de la abogacía. Hoy en día, mediante la utilización de esta herramienta pueden realizarse predicciones sobre delitos de tipo penal, delincuentes y la posible reincidencia que pudieran tener. En cuanto al código deontológico y la legalidad en la aplicación de la IA supone nuevos retos en su regulación y posibles modificaciones para tipos que todavía no están contemplados.

Ya son varias las editoriales que han presentado sus propias herramientas de IA que suponen una gran utilidad para los profesionales del sector legal, agilizando la búsqueda de jurisprudencia, documentos, formularios, aportando así una mayor fiabilidad al disponer de recursos que se encuentran en bases de datos oficiales.

En conclusión, la entrada de la inteligencia artificial, por una parte, presenta oportunidades para mejorar la eficiencia y calidad del servicio, por otra, la abogacía deberá adaptarse a nuevos retos y mecanismos de trabajo y a su vez deberá participar activamente en los debates legislativos sobre esta cuestión para asegurarse de seguir ofreciendo un servicio de calidad a la sociedad.